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No están siendo momentos fáciles para Mar Flores, quien, a raíz del embarazo de Alejandra Rubio y su hijo Carlo Costanzia, no ha parado de recibir preguntas para saber cuál es su opinión y más después de conocer las reacciones de Terelu Campos. No es para menos, al tratarse de una de las futuras abuelas de la criatura. Sin embargo, es de sobra conocido que la situación de la modelo está siendo muy incómoda y al aparecer las primeras imágenes de ella tras conocerse la noticia del embarazo, no ha dudado en mostrarse molesta.
La prensa ha conseguido grabar a Mar Flores por la noche, durante su salida del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, cuando regresaba de un viaje que le había mantenido alejada del foco mediático. En las imágenes se le puede ver salir con ropa cómoda y ancha y un recogido, a la vez que se le podía observar algo cansada y desorientada mientras buscaba un medio de transporte con el que regresar a casa.
Los periodistas pretendían saber su opinión sobre el embarazo de primera mano, así como la supuesta mala relación que mantendría con Terelu Campos. Entre otras cosas, por la amistad de colaboradora de Mediaset con Nuria González, viuda del empresario Fernando Fernández Tapias que, a su vez, fue expareja de Mar Flores. Aunque también afectan los duros comentarios que María Teresa Campos le dedicó a la modelo por su infidelidad con Alessandro Lequio.
Preguntas muy incómodas
Ante las preguntas, la modelo no hacía mucho caso, se mostraba esquiva, hasta que, de repente, tuvo que retroceder y casi se choca con el periodista que la seguía, pero ella solo decía: "Gracias, eh". Mientras, ponía la mano estirada en la cámara para intentar que no la grabasen. Sin embargo, llegó el momento en el que la actitud del periodista empezó a molestar a Mar Flores y ella no dudó en hacérselo saber.
" ¿Me vas a seguir así todo el rato? ", preguntaba al periodista. " Porque no tengo nada que decir, yo me voy a dormir que mañana trabajo temprano ", zanjaba, a la vez que soltaba un "gracias". De esta manera, Mar Flores se metía en el taxi que por fin había encontrado y no daba más declaraciones.

