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Kiko Rivera no ha tenido una vida fácil, ni cuando era pequeño, ni ahora que tiene más de 30 años. Los últimos meses han sido para él agridulce, con problemas económicos, disgustos por la situación carcelaria de su madre y el descubrimiento de que padece diabetes, pero también ha mostrado su unidad con sus hermanos, ha tenido una nueva hija y a Isabel Pantoja se le concedió el Tercer Grado.
Haciendo balance, y pese a todo, quizás sea mejor lo bueno que lo malo, y por ello Kiko Rivera disfruta de las alegrías que le ofrece la vida. Lo más importante para él son sus dos hijos, y afortunadamente ahora está con ambos.
Familia unida
Tan contento está de tener a sus pequeños juntos, que ha querido regalar a sus seguidores una preciosa imagen en la que sale bien acompañado por el niño y la niña de sus ojos. De un lado su primogénito, Francisquito, el hijo que tuvo con Jessica Bueno el 6 de noviembre de 2012. Del otro, Ana, nacida el pasado 15 de diciembre fruto de su relación con Irene Rosales.
En la instantánea no se puede ver la cara de ninguno de los niños, y es que Kiko Rivera quiere preservar su intimidad, sobre todo en el caso de Francisquito, que ya tiene 3 años y tiene un rostro más reconocible. Como comentario, el dj señaló junto a la instantánea: "Ellos son mi vida... los amo".
El sevillano tiene además otro motivo para estar contento en relación a su hijo mayor, ya que volverá a España. Jota Peleteiro ha sido cedido al Eibar, por lo que el futbolista, su mujer, Jessica Bueno, y el pequeño Francisquito regresan a Euskadi tras su estancia en Londres. Ahora, Kio Rivera tendrá a su vástago más cerca.

