Ana María Abascal y la Duquesa de AlbaLa nueva no es otra que su nieta Cayetana seguirá viviendo en Madrid con su madre, Eugenia Martínez de Irujo, según ha decidido la juez que instruye el caso, lo que ha alegrado sobremanera a la Casa de Alba, en contraste con la pena de los Rivera.
La Duquesa salió a comer con un par de amigas, entre ellas la hermana de Nati Abascal, que reside en Sevilla, y aprovechó para expresar la felicidad que sentía. "Estoy muy contenta. Creo que se ha hecho justicia", decía la Duquesa de Alba, que desde el primer momento se ha volcado con su hija.
La Duquesa lima asperezas con su hijo Jacobo
Muy juvenil con un vestido azul, muy colorido y el pelo recogido con dos ganchos, la Duquesa desprende felicidad. Pero esta no es la única alegría de la Duquesa. Sus tensas relaciones con su hijo Jacobo y su nuera Inka Martí se han limado, y parece que las cosas marchan mejor entre Doña Cayetana y los Siruela.
La Duquesa de Alba e Inka MartíPor contra, a lo que no contestó la aristócrata fue a la pregunta de si algún día podría perdonar a Fran Rivera por lo que ella consideró una traición, el haber reclamado la custodia de Tana. Tanto dolor produjo su maniobra, que Doña Cayetana confesó que su yerno favorito había muerto para ella.
