La vida ha cambiado para Carla Goyanes desde que perdiera a su padre, el empresario Carlos Goyanes, el 7 de agosto de 2024. La empresaria ha organizado en Marbella el primer Torneo de Pádel Memorial Carlos Goyanes, en su localidad de siempre, San Pedro de Alcántara. Se trata de un homenaje con un fuerte componente emocional, ya que el pádel fue una de las pasiones que padre e hija compartían. "Mi padre fue uno de los pioneros del pádel aquí. Le habría hecho mucha ilusión ver lo que hemos logrado ".
El torneo, pensado para niños y niñas de entre 5 y 16 años, ha sido todo un éxito de participación, con 69 parejas inscritas y muchas familias involucradas. "Me recordó a las clases que dábamos juntos en La Moraleja, con mis primos y él. O a los partidos en los que ya jugaban mis hijos", recuerda Carla. Incluso su hijo Beltrán se refirió al torneo como su favorito. "Ha sido un éxito inesperado, una gran manera de tenerle presente ", afirmó.
Carla quiso que el torneo reflejara los valores que su padre siempre promovió: la importancia del deporte en la infancia, el trabajo en equipo, el respeto, la gestión emocional y, sobre todo, el disfrutar sin importar el resultado. "En un momento en que los niños están tan enganchados a las pantallas, es fundamental fomentar el deporte, que aprendan a ganar, a perder, a superarse ", explicó.
Un proyecto con vistas a futuro
El éxito de esta primera edición ha dejado claro que no se trata de un evento puntual. Carla Goyanes ya tiene planes para consolidarlo año tras año. "Queremos que no se quede solo entre amigos y conocidos. Me encantaría que vinieran más niños de toda la zona, incluso de fuera. Que sea una fiesta del pádel, pero también una celebración de todo lo que mi padre representaba ", asegura.
Carla y su madre atraviesan estas fechas "con altibajos", intentando mantener una actitud positiva y centrarse en "disfrutar de los que aún están aquí". En este sentido, Carla no quiso despedirse sin dedicar unas palabras a quienes han hecho posible el torneo : su marido Jorge, que estuvo a su lado durante toda la organización; el club Nueva Alcántara, que colaboró en tiempo récord; Hexagon Cup, que cedió los premios; y todos los voluntarios, padres, abuelos y amigos que se acercaron al homenaje.