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Por desgracia para muchos padres, sus hijos tienen que echar a volar y abandonar el nido tarde o temprano. Alejandra Rubio no se lo ha pensado mucho y ha dejado atrás su residencia familiar poco después de alcanzar la mayoría de edad. Así, Terelu Campos ha tenido que ver cómo su ya no tan pequeña hija se ha ido de casa para empezar una nueva etapa junto a su novio, Álvaro Lobo, con quien comparte piso en el madrileño barrio de Malasaña.
Poco ha tardado la mayor de las Campos en acercarse a echar una visitilla a su hija para disfrutar de un almuerzo en una de las cientos de terrazas que se despliegan por la zona. Las dos están muy unidas y no ha tenido que ser nada fácil para Terelu ver que la habitación de Rubio está vacía, pero seguro que pasar este rato agradable con ella le ha subido los ánimos.
"Con la niña de mi vida en su barrio", escribía la colaboradora de 'Sálvame' junto a un selfie de madre e hija que ha compartido en su cuenta de Instagram. Así, ambas han demostrado que aunque ya no vivan bajo el mismo techo, su vínculo sigue siendo igual de fuerte y todo parece indicar que se verán tan a menudo como antes, ¡eso sí que es amor del bueno!
"No vivo del cuento"
Sin duda han sido unos días de muchos cambios para Rubio, que ha empezado a estudiar moda en la universidad a la vez que hacía la mudanza. La influencer ha querido dejar claro en sus redes sociales que el piso lo pagan a medias entre ella y Lobo, y que sus padres solo la han ayudado con algunos mueles del piso. "Me han comprado el menaje, la vajilla, el sofá y la cama porque mi regalo de los 18 lo cancelé, porque sabía que les tenía que pedir una ayudita en cuanto a las cosas de casa, ¡pero la casa la pago yo!", sentenció.
