La ganadora de 'Gran Hermano 14' ha querido abrirse con sus seguidores y contar dónde está el origen de ese problema y cómo ha afectado a su vida: "El tema de la ansiedad a mí me ha traído bastantes problemas. Siempre pensaba que era un agobio hasta que me pasó esto, y cuando me pasó ya me di cuenta de que era un problema. Es una enfermedad bastante complicada hasta que identificas lo que te pasa y te lo tratas".
Unas pruebas con las que el pesonal médico quería comprobar si lo que le había ocurrido era un ataque de epilepsia: "Las pruebas salieron bien y lo que me dijeron es que había tenido una bajada de tensión brutal y me había provocado al desmayo. Yo tengo la tensión baja y me había desmayado más veces, aunque nunca así de fuerte. Pero a raíz de ahí le cogí miedo a muchas cosas, como a coger el coche".
Susana Molina: "Fue una época en la que me perdí muchísimas cosas"
A raíz de ese percance Susana Molina se obsesionó con la posibilidad de que ese episodio se pudiera repetir, hasta el punto de evitar ir a los sitios y de que, cuando iba a algún lado sin su madre o sin Gonzalo, creía que le iba a ocurrir algo si no estaba con esas personas de su confianza: "Fue una época en la que me perdí muchísimas cosas. Yo iba a todo pero mi cabeza no estaba ahí. Yo estaba cenando con mis amigas pero mi cabeza pensaba todo el rato que me iba a desmayar. Iba a un concierto y buscaba todo el rato las salidas...".
En ese momento la de 'La isla de las tentaciones' empezó a "investigar un poco sobre el tema" y se dio cuenta de que tenía todos los síntomas de un cuadro de ansiedad, pero no pidió ayuda: "Mi fallo fue no acudir nunca a un especialista, a un psicólogo, para tratármelo. Como siempre estaba con Gonzalo no había problema. Yo le decía que me iba a desmayar y él me decía que no y me tranquilizaba. Lo integré en mi vida como si fuera algo normal, pero mal, porque me condició un montón. Verbalizarlo hacía que cada vez me pasase menos, dos o tres veces al mes".
Eso le hizo empezar a despreocuparse del problema hasta que se ha producido su ruptura con Gonzalo Montoya: "En junio empiezo una nueva vida sola. Ya no está Gonzalo sentado en el baño mientras yo me ducho. Y vuelve a pasarme otra vez con más frecuencia. Yo cabezona de mí me dije que tenía que aprender a vivir sola y que no me pasase eso. A mí me funcionó el decir 'no te vas a desmayar'. El único proceso que me cuesta más es el tema de viajar sola o el del coche, que lo doy por imposible". No obstante, ha decidido empezar a tratárselo: "Voy a empezar a tratarme con un psicólogo porque no tiene sentido que viva con esto cuando es una cosa que se puede mejorar. No hay que vivir con ansiedad".