Sin embargo, lo que no se había visto hasta este momento era el después de dicha discusión, pues Mario termina discutiendo con Claudia por decirle que intente no hablar mal: "Pierdes la razón chillando así", le comentaba, a lo que él, visiblemente molesto, le respondía: "Me da igual si pierdo la razón, es mi personalidad". A Claudia no le gustó nada la respuesta y así se lo hizo saber: "A mí no me hables así que yo no te he hecho nada, simplemente estoy diciendo eso".
"¿Pero tú no me conoces suficiente como para saber que no me puedes hacer 'cállate' cuando estoy alterado?", le reprochaba muy enfadado Mario, pero Claudia insistía: "¿Pero es que no ves que pierdes la razón hablando así? También le has hablado mal a Carmen y no tiene nada que ver". Mario seguía en sus trece: "Porque no me da la gana que cuando hablo de algo yo es monotema y cuando hablan los demás no. Yo hablaré de lo que me apetezca hablar".
Discusión con reconciliación
"Yo soy como soy", le decía su novio pero Claudia se lo rebatía: "No eres así en tu vida normal". "Sabes que me tienes que calmar, no ponerme tú de mal rollo", le recordaba él. Finalmente, se acercaban de nuevo y se sonreían tímidamente: "Solo nos queda el humor aquí", le decía Mario. Ambos terminaban fundiéndose en un sentido abrazo y un tierno beso sellando así la guerra.