Íñigo de Arteaga, conde de Saldaña y de Corres, ha fallecido este domingo en un accidente de avioneta. Era el piloto y viajaba con Gonzalo Lapique Alonso (45 años) y María África de la Calle del Cubillo (21 años). Los tres murieron en el acto, según ha sabido Europa Press por fuentes cercanas a los hechos.
El choque ha sucedido en Toledo, concretamente en San Pablo de Los Montes, a las 18:30 horas por motivos aún desconocidos y que provocó la muerte en el acto de las personas que viajaban en la avioneta.
Pertenecía a una familia aristocrática
Después de finalizar sus estudios en Ciencias Económicas y Empresariales, Íñigo de Arteaga vivió en Londres durante once años y ahora llevaba la gestión de las propiedades de la familia, tales como el Palacio del Infantado en Guadalajara, el palacio de Lazcano en Guipúzcoa, el castillo de Manzanares del Real en Madrid, el castillo de Calahorra en Granada y el castillo de la Monclova.
Hijo de los Duques del Infantado, Íñigo de Arteaga y del Alcázar tenía cuatro hermanos, Iván, Ana, Carla y Almudena, también muy conocida por su profesión como escritora histórica que desarrolló tras diplomarse en Genealogía, Heráldica y Nobiliaria.