Fiscalía y acusación particular -la defensa de la víctima- pedirán ocho años de prisión mientras que la defensa del brasileño insistirá en que las relaciones sexuales fueron consentidas por ambas partes y que, por lo tanto, no habría delito ni razón alguna para enviarle a prisión tal y como ha adelantado La Vanguardia y que está en consonancia con las declaraciones que Alves había dado ya ante la jueza en su última comparecencia.
Si bien tras la entrega de los escritos de acusación y defensa a la jueza esta establecerá una fecha para la celebración del juicio, esta podría ser mucho más tarde de lo esperado. Como se llevaba comentando públicamente desde hace ya semanas, se esperaba que el juicio tuviese lugar a finales de este 2023 cuando se cumplía un año de los hechos. En cambio ahora los tiempos podría dilatarse un poco más y varias serían las razones.
Las dos razones que retasaran el juicio a 2024
"En la trastienda se está trabajando a tope en este caso porque la sombra de un eventual acuerdo de conformidad que anule la posibilidad de la celebración de un juicio porque todas las partes, por supuesto con el ministerio fiscal, pero especialmente entre la defensa de ambas partes, acuerden una sentencia de conformidad", asegura el periodista: "Este programa puede adelantar algo más que un rumor, se fundamenta en datos, están situando alrededor de los 4 años de pena y una jugosa indemnización de 6 ceros que se ha puesto encima de la mesa".