Sin embargo, la cantante cometió el error de llamar a la primera ministra de Australia lesbiana, y tildarla de "hipócrita" por defender el "matrimonio tradicional".
Allá donde pisa, Lady Gaga se cubre de elogios. La cantante recibió en Singapur un reconocimiento por las ventas de su último álbum, 'Born this way' hace pocos días, y en su parada por Australia durante su gira de promoción ha vuelto a conseguir un nuevo galardón.
Nada menos que ser ciudadana honoraria de Sidney. La alcaldesa de la ciudad, Clover Moore, ha sido la encargada de entregarle el certificado en agradecimiento por su apoyo a la comunidad gay, lesbiana, bisexual y transexual.Gaga, que ha vendido en todo el mundo más de 5 millones de copias de su último CD, siempre se ha sentido muy cercana a la comunidad LGTB. Nos remitimos al primer single de 'Born this way', titulado igual que el disco, que ha querido ser un nuevo himno para los homosexuales que la han apoyado desde los comienzos de su carrera.
Problemas con la primera ministra
Tan apegada está a ellos que alguna que otra vez mete la pata creyendo saber la orientación sexual de las personas. Durante su estancia en Australia dio por hecho que la primera ministra australiana, Julia Gillard, era lesbiana.
Durante una entrevista, le preguntaron sobre Gillard y su disconformidad con los matrimonios homosexuales, y la cantante la tildó de "hipócrita" por vivir con su pareja (a la que creyó erróneamente una mujer) pero defender el sentido de matrimonio tradicional.Al comprobar que estaba equivocada, Lady Gaga pidió volver a grabar la pregunta, y cambió su discurso para hablar de los distintos significados que tiene el término "pareja" en EEUU, incluidas las relaciones entre personas del mismo sexo.
Lady Gaga aprovechó el viaje para visitar dos clubs de ambiente muy conocidos de la ciudad, en los que ofreció conciertos improvisados y volvió a mostrarse cercana con su público.