-
-
-
-
-
-
-
La investigación sobre el doble homicidio de Rob Reiner y Michele Singer ha incorporado nuevos elementos tras conocerse el comportamiento que Nick Reiner, de 32 años, mostró la noche anterior en una fiesta navideña organizada por Conan O'Brien. Según The Wall Street Journal, el joven se acercó a varios invitados, incluidos actores de primer nivel, con u na serie de preguntas desconcertantes:"¿Cómo te llamas? ¿Cuál es tu apellido? ¿Eres famoso?".
Fuentes citadas por el diario aseguran que Nick interrumpió conversaciones privadas, entre ellas una del actor Bill Hader, quien le pidió que respetara el momento. Testigos describen que Nick reaccionó con incomodidad y abandonó la conversación de forma abrupta. Finalmente, se le pidió que abandonara la fiesta debido a su actitud insistente.
Romy Reiner junto a su padre, Rob Reiner | Foto: InstagramSegún The New York Times, Romy logró entrar en la casa y fue entonces cuando descubrió la tragedia. Fuentes cercanas a la familia explican que la joven salió de la vivienda en estado de shock y pidió a su compañera de piso que llamara al 911 mientras ella contactaba con Billy Crystal, amigo íntimo de su padre. Lo más importante, es que Romy desconocía que su madre también había fallecido. Fueron los paramédicos, ya en la escena, quienes le comunicaron la noticia.
Horas después del hallazgo, agentes de homicidios y alguaciles federales localizaron a Nick cerca del campus de la Universidad del Sur de California. Testigos citados por Daily Mail describen una detención rápida y coordinada, en la que el joven fue sorprendido por los agentes y se mostró sorprendentemente calmado.
Reiner, en vigilancia suicida mientras avanza el proceso judicial
Actualmente, se encuentra bajo vigilancia suicida en el Centro Correccional Twin Towers, sin posibilidad de fianza. Su primera comparecencia judicial se retrasó porque, según su abogado, no estaba médicamente autorizado para declarar.
Romy Reiner junto a su hermano Nick Reiner | Foto: InstagramAunque las autoridades han confirmado que no hay indicios de consumo de drogas en el momento del crimen, el historial de Nick incluye múltiples ingresos en rehabilitación. Él mismo contó en una entrevista que había pasado por 17 centros de desintoxicación antes de cumplir 22 años y que llegó a vivir en la calle en varios estados de EE.UU. tras rechazar la ayuda familiar.
La Fiscalía del Condado de Los Ángeles ha imputado a Nick Reiner por dos cargos de asesinato en primer grado, con una agravante por uso de arma blanca. De ser declarado culpable, podría enfrentarse a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional. La fiscalía tampoco descarta solicitar la pena de muerte, una decisión que se evaluará conforme avance la investigación.
