Silvia Bronchalo rompe su silencio sobre el juicio de su hijo Daniel Sancho: "Prefiero ser prudente"

El juicio contra Daniel Sancho por el asesinato de Edwin Arrieta continúa en Tailandia, y ha sido a la salida de los juzgados tras la sexta jornada cuando el programa 'TardeAR' ha podido conseguir unas declaraciones de Silvia Bronchalo, que se encuentra siguiendo al detalle el juicio de su hijo, con el que se conocerá si finalmente será juzgado con pena de muerte o cadena perpetua. La madre de Daniel Sancho ha roto su silencio, hablando así por primera vez sobre el proceso.

Silvia Bronchalo acudiendo a la segunda sesión del juicio de Daniel Sancho

En esta sexta jornada el juez ha tomado declaración a los primeros abogados que asistieron a Daniel Sancho, así como a los traductores que se encargaron de interpretar sus palabras durante su detención en agosto de 2024. " De momento no ha habido nada definitivo que ponga cuatro clavos en el ataúd judicial de Daniel Sancho. Todavía no ha habido ese testimonio definitivo donde los padres o allegados de Sancho puedan venirse abajo", ha dicho Marlasca en 'TardeAR'.

Como de momento no hay nada claro, Silvia Bronchalo prefiere ser prudente, pero también se ha mostrado más tranquila y relajada. Su silencio ha quedado roto cuando ha dicho: "Queda todavía la mitad del juicio. Es mejor esperar un poquito. Prefiero ser prudente". De alguna manera ha querido justificar su actitud los últimos días, puesto que se la ha podido ver muy seria y apagada, ya que en todo momento ha privado la cautela en sus acciones y palabras.

Silvia Bronchalo llegando a la quinta sesión del juicio a Daniel Sancho en Tailandia

El reportero Alejandro Rodríguez, que se encuentra en Tailandia, ha conseguido estas declaraciones y ha comparado su actitud con la del padre de Daniel, Rodolfo Sancho: " Se muestra muy prudente a diferencia de su exmarido, Rodolfo Sancho, que entra y sale de la corte con una sonrisa e incluso nos hace bromas. Ella siempre se ha querido mantener en un segundo plano".

Mantiene un perfil bajo

También dentro de la sala quiere mantenerse en un segundo plano, ya que se sienta al final, lejos de su ex que está justo detrás de su hijo, y no intercambia ninguna palabra con Rodolfo Sancho en ninguna de las sesiones. Es acompañada por personal de la embajada y no habla con los abogados y asesores de los Sancho.