Este 21 de agosto, Lourdes Montes compartía en sus redes sociales una noticia que llevaba meses esperando: su hermana Sibi se ha convertido en madre por primera vez. Lo hacía con una imagen sencilla pero cargada de emoción, acompañada del mensaje "Tía orgullosa", confirmando así el nacimiento del pequeño Mateo, que comparte nombre con su padre, Mateo Ibáñez.

La pareja celebró su primer aniversario de boda el pasado 21 de junio, y apenas dos meses después han dado la bienvenida a su primer hijo. El embarazo, que se anunció hace cinco meses también a través de redes sociales, ha sido llevado con discreción, aunque Sibi no ha renunciado a su vida social: ha asistido a bodas, ferias y eventos, siempre con una sonrisa y sin perder el ritmo.
La alegría en casa de los Montes es doble este año, ya que Lourdes también dio a luz a su tercer hijo, Nicolás, el pasado abril. De hecho, el destino quiso que ambas hermanas coincidieran en el mismo centro médico: Lourdes ingresada para dar a luz, y Sibi por un pequeño susto de salud. Fue entonces cuando la psicóloga y coach deportiva conoció a su nuevo sobrino, antes incluso de que naciera su propio hijo.
La relación entre Sibi y Mateo comenzó en 2021, cuando él jugaba en el Club Atlético Central y ella trabajaba como coach del equipo. Tras tres años de discreta relación, se casaron en una ceremonia íntima en El Puerto de Santa María, Cádiz, donde los sobrinos de Sibi participaron como pajes. Desde entonces, han mantenido un perfil bajo, alejados del foco mediático que rodea a la familia Rivera-Montes.
Una familia que sigue creciendo
Con la llegada de Mateo, la familia Montes-Parejo suma un nuevo integrante que se llevará apenas unos meses con su primo Nicolás. Lourdes y Sibi, muy unidas desde siempre, han compartido esta etapa con complicidad y apoyo mutuo. Aunque Sibi no es especialmente activa en redes sociales, ha utilizado su perfil para compartir los momentos más especiales de su vida, siempre respetando la privacidad de su marido. Ahora, comienza una nueva etapa llena e biberones, pañales y noches sin dormir, pero también de amor y nuevas aventuras familiares.