Hace pocos días, Anita Matamoros contaba a todos su seguidores que muy poco le faltó para desmayarse al verse el pecho para curarse después de la operación, pero parece que la joven se ha recuperado completamente y la noche del viernes 15 de septiembre disfrutó de una fiesta inolvidable junto a sus amigas más incondicionales: Marina Romero, la novia de su hermano, Javier Tudela; y Luna Serrat, la nieta de Joan Manuel.
Anita Matamoros de resaca / InstagramAsí, tras 11 días de larga y tediosa recuperación, Matamoros ha recuperado la vitalidad que tanto la caracteriza y no ha dudado en salir a celebrarlo por todo lo alto. Primero acudió a un desfile de la firma Highly Preppy que tuvo lugar en Madrid, y después se dejó caer por una increíble fiesta que narró con todo detalle a través de la sección de historias de su cuenta de Instagram. "Llevo, una, dos, tres... No sé ni cuántas semanas en reposo, ¡pero hoy se sale!", festejaba.
La influencer lo pasó en grande bailando y bebiendo en dos conocidas discotecas del centro de la capital española, acompañada de sus amigas, a las que también se unieron el fotógrafo Diego Varjak y las que fueran concursantes de 'Gran Hermano': Raquel Lozano y Liz Emiliano. Todos juntos disfrutaron de una agradable velada en la que no les faltó de nada en las salas VIP de los clubes, equipadas con todo tipo de lujos y detalles.
Por la noche lobos, y por el día perros
Pero claro, la peor parte de estas fiestas llega al día siguiente, cuando la resaca llama a la puerta y salir de la cama se convierte en todo un reto. Así lo confesó Matamoros, que dejó muy claro que solo se levantaría para tomar comida basura que la ayudara a reponer fuerzas para poder seguir acudiendo a los eventos que marcan su apretada agenda de it girl.
