La pareja estaría atravesando un momento muy complicado tras la decisión del jugador de no abandonar su carrera profesional en el fútbol americano.
Los rumores de crisis entre el legendario jugador de la NFL, Tom Brady, y la supermodelo Gisele Bündchen son cada vez más sonados. Tras las afirmaciones de una fuente cercana a la pareja de que la modelo había decidido pasar unos días en su tierra natal, Brasil, tras una fortísima pelea con el quaterback, varios medios aseguran que Bündchen habría vuelto a Florida junto a sus hijos, pero no estaría con Brady.
Los problemas entre el matrimonio, que se dio el 'sí, quiero' en 2009, habrían surgido tras la decisión del jugador de no abandonar el campo de juego a pesar de haber anunciado su retirada. Solo dos meses después de comunicar el fin de su carrera, el jugador rectificó y anunció que jugaría la temporada 23 con los Tampa Bay Buccaneers. Algo que habría enfurecido a su mujer, quien habría decidido abandonar el domicilio tras un fuerte enfrentamiento. Una vez la situación se ha enfriado, Bündchen habría decidido regresar a Florida, aunque no para estar con su marido. Una fuente cercana a la pareja así lo asegura: "Gisele no ha vuelto con Tom" y, además, añade que solo ha vuelto para estar con sus hijos: "Ha volado a Florida para estar con sus hijos, pero no ha estado en su casa en Tampa".La fuente también asegura que, a pesar de la decisión de la modelo, Tom Brady espera que puedan reconciliarse: "Tom todavía confía en una reconciliación. Gisele ya le ha dicho otras veces que lo dejaba y, cuando se enfriaba, siempre encontraban la forma de volver". Mientras que algunas personas cercanas a la pareja aseguran que la pareja ya estaría divorciada o habría comenzado los trámites, la fuente ha asegurado que eso aún no ha ocurrido.
Los problemas del matrimonio
En cuanto al futuro de la pareja, varios medios aseguran que la modelo se quedará en Miami, aunque no en la casa que ha compartido con Tom Brady hasta el momento, pues aún no habría regresado a ella. El matrimonio ha estado enfrentándose a varios problemas desde la rectificación de Brady sobre su futuro profesional, no siendo la pelea que provocó la marcha de Bündchen la primera que la pareja habría protagonizado. "Ha habido problemas en el matrimonio por la decisión de Tom de no retirarse. Gisele siempre ha sido la que ha estado con los niños", asegura la fuente cercana a la familia, a la vez que confiesa que la decisión de abandonar el fútbol americano fue tomada por los dos, mientras que la de volver fue únicamente idea del jugador: "Ambos estuvieron de acuerdo en que él se retirara para centrarse en la familia, después él cambió de idea".
Gisele Bündchen y Tom Brady comparten dos hijos, Benjamin, de 12 años, y Vivien, de 9. Además, el jugador tiene un hijo mayor, Jack, de 15 años, fruto de su anterior relación con Bridget Moynahan. Tras los problemas entre el matrimonio, Tom Brady habría decidido tomarse un descanso de once días en sus entrenamientos para centrarse principalmente en sus hijos y en ser un "superpadre". A su vuelta, el jugador aseguró que todo el mundo "tiene situaciones diferentes con las que lidiar", y que eso era lo que él estaba haciendo.