El hijo de Isabel Pantoja ha celebrado en su cuenta de Instagram los más de treinta kilos que ha perdido desde que decidió bajar de peso.
Hace ya bastante tiempo que Kiko Rivera empezó a mostrar sus deseos de perder peso a base de dietas y ejercicio. Sin embargo, poco después de comenzar su nuevo estilo de vida, el hijo de Isabel Pantoja perdía la voluntad y regresaba a los malos hábitos que le habían hecho engordar. Pero en 2017 tomó una sabia decisión y Rivera se sometió a una intervención para colocarse una banda gástrica. Desde entonces ha ido perdiendo peso paulatinamente, presumiendo de ello en su cuenta de Instagram y mostrando a todos sus seguidores el nuevo aspecto que tanto le costó conseguir. Después de un año, el cantante por fin ha bajado de la barrera de los ochenta y lo ha querido celebrar por todo lo alto y como mejor se le da: compartiendo el logro en sus redes sociales. Con 79 kilos y 700 gramos, el sevillano disfruta de su peso más bajo en los últimos años.
Mejor por dentro y por fuera
Sin embargo, Rivera ha afirmado que más que por el cambio físico, decidió perder esos kilitos que le sobraban para sentirse mejor y más saludable. En muchas entrevistas concedidas, el DJ comentaba que jugar con sus hijos y corretear detrás de ellos se hace ahora mucho más fácil y divertido que cuando llegó a pesar más de ciento diez kilogramos.
Por supuesto, la salud es lo primero, pero la transformación de su aspecto físico también es evidente. Ahora que Rivera se encuentra más cerca de su peso ideal, se atreve a vestir con las últimas tendencias y se ha convertido en todo un it-boy, sumando así un nuevo éxito en la lista de victorias de Paquirrín, ¡enhorabuena, Kiko!