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Horas después de que la revista Lecturas publicara una portada con Irene Rosales como protagonista y la frase " he tenido mil motivos para dejar a Kiko ", la modelo ha recurrido a sus redes sociales para aclarar que no ha concedido ninguna entrevista reciente. " Quiero dejar claro que no he hecho ninguna exclusiva, ni absolutamente nada ", escribió en sus historias de Instagram, desmintiendo así cualquier colaboración con la publicación.
Irene asegura que la frase que aparece en la portada fue probablemente tomada de alguna declaración pasada. " Esa foto es de hace muchísimo tiempo, las 'declaraciones' las habrán cogido de alguna vez que haya podido decir yo esa frase y han aprovechado el momento", explicó. La modelo se muestra molesta por el uso de sus palabras en un contexto que no ha autorizado, especialmente en un momento tan delicado como su separación.
Cuando Irene comenzó su relación con Kiko, él atravesaba uno de los momentos más oscuros de su vida. Su adicción a las drogas y los problemas con Hacienda eran públicos, pero ella decidió apostar por él. "Empecé con él en el peor momento", recuerda. Durante años, la pareja vivió con lo justo, llegando a subsistir con 700 euros mensuales. Aunque su situación económica mejoró, la negativa de Kiko a comprar una vivienda en propiedad fue otro punto de fricción que deterioró la confianza entre ambos.
rene Rosales desmiente haber concedido una exclusiva | foto: Instagram Uno de los episodios más controvertidos de su historia fue la boda. Aunque celebran una ceremonia en 2016, Kiko confesó tiempo después que no estaban legalmente casados. Irene, por su parte, asegura que siempre supo que los papeles se habían traspapelado, pero decidió seguir adelante por el delicado estado de salud de su padre. "Para mí, yo estaba casada aunque no fuera de forma legal ", declaró. Esta revelación ha abierto el debate sobre la validez de su unión y las implicaciones legales que podría tener.
Durante años, Irene ha sido señalada como la responsable de los conflictos entre Kiko y su familia, especialmente con Isabel Pantoja. En Lecturas, en declaraciones pasadas, se defiende: "Me ha molestado mucho que digan que manejo a Kiko ". La modelo llegó a asegurar que ha intentado mantener la paz, pero que ha sido víctima de ataques injustificados. Su silencio, dice, ha sido interpretado como complicidad, cuando en realidad solo intentaba proteger a su familia.
Una decisión tomada hace meses
Aunque la noticia de la separación ha sorprendido a muchos, Irene revela que la decisión se tomó hace tiempo. Durante el verano, la pareja incluso compartió vacaciones con sus hijas, demostrando que su prioridad sigue siendo el bienestar de las pequeñas.
A pesar de no haber concedido una nueva entrevista, Irene ha dejado claro que no va a permitir que se tergiverse su historia. Su mensaje en Instagram es una forma de recuperar el control sobre su narrativa y de proteger su intimidad. "No he hablado con nadie ni he hecho absolutamente nada", insiste. Con esta aclaración, Irene marca distancia con los titulares y reafirma que su prioridad sigue siendo su familia.
