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Ha sido posiblemente la Semana Santa más complicada de toda su vida. A principios de semana Paula Echevarría viajaba a su Candás natal para pasar unos días con su familia y sus amigos, algo que no sucedía desde la pasada Navidad. Allí ha pasado unos días relajada y tratando de olvidar los complicadísimos días a nivel mediático que está viviendo desde que se filtrara su profunda crisis con David Bustamante.
Ella misma comentaba en sus redes sociales las ganas que tenía de volver a pisar su queridísima Asturias y las ganas que tenía también su hija Daniella de pasar tiempo con sus primos, algo que se tuvo que retrasar hasta el miércoles 12 de abril puesto que la primera parte de las vacaciones la niña las pasó con su padre en San Vicente de la Barquera.
Pero por fin llegó el reencuentro madre e hija -la pareja o expareja volvió a verse las caras y todo fue tan cordial como siempre- y ambas pudieron disfrtutar de las procesiones vividas estos días allí, además de aprovechar para degustar la comida típica asturiana.
Paula Echevarría busca paz con los suyos
" Algo se está cociendo... #MiMamaMeMima #Fabada #PuxaAsturies #AsturiasPatriaQuerida ", publicó Echevarría junto a una foto de la fabada que se iba a comer pocos minutos después. Ya por la noche colgó una fotografía de ella en el puerto de la localidad, donde ha encontrado la paz que necesitaba después de todos estos complicados días.
Por su parte, la Semana Santa de David Bustamante ha sido mucho más relajada y calmada. Sus redes sociales no se actualizan desde que mostrase lo bien que se lo pasaba con su familia en un día de campo, justo el mismo día que saltaron los rumores de una posible separación de la pareja. Ahora tratan de salvar su relación al tiempo que preparan juntos y como una familia unida la Primera Comunión de Daniella, que será a principios del mes de mayo.
