Los días ajetreados de Beyoncé han dado a su fin, de momento. Tras grabar su próximo videoclip de Coney Island y actuar en el Made in America Festival 2013, la cantante ha viajado hasta Ibiza para pasar unos días con su hija Blue Ivy Carter y tomarse un merecido descanso.
Al contrario que Blue Ivy, que no paraba de llorar por el cansancio, Beyoncé estaba fresca como una rosa y eso que la noche anterior había sido movida. La cantante actuó en el Made in America Festival 2013 en compañía de Phoenix, Empire of the Sun, 2 Chainz o Imagine Dragons.
Gusto por la playa
Tanto Beyoncé como Blue Ivy son amantes de las olas y el sol por lo que es habitual en ellas escaparse a la playa cuando tienen unos días libres. La última vez que se dieron un chapuzón Beyoncé inmortalizó ese momento en las redes sociales con un par de fotos jugando en la arena y contemplando la puesta de sol.
De hecho, Ivy ha estado con ella tanto en los momentos de relax como en los de trabajo, ya que viajó con su madre durante su gira mundial, visitando países como Serbia, Alemania, Italia y el Reino Unido.