Jennifer Aniston es una de las actrices de eterna juventud en Hollywood. A pesar de sus 46 años, la protagonista de 'Cake' es una de las intérpretes más clásicas respecto a su imagen ya que, a diferencia de muchas compañeras de profesión, Aniston no ha innovado demasiado en lo que a cambios de looks se refiere.
Un melena lisa, de longitud media-larga, teñida de color rubio y peinada con raya al lado. Esta ha sido la invariable opción capilar con la que hemos podido ver a la actriz durante más de diez años, pero Aniston comenzó su carrera a principios de los 90 y al igual que el resto, a toro pasado comprobamos que ella también se vio influenciada por las modas de la época.
Jennifer Aniston en los años 90
Entonces apenas tenía 21 años, y como tal, aún se mostraba de forma natural, con su color original de pelo, flequillo y los peinados típicos de la época noventera. Pero su ondulada melena castaña no era la única distinción que tenía la imagen de Aniston respecto a la actual: su cara era mucho más redonda. Después le llegó su gran momento televisivo: el papel de Rachel en la mítica serie 'Friends'.
Durante toda una década pudimos ver su evolución paralela a la del personaje que comenzó llevando una media melena algo más oscura con alguna mecha rubia. Después llevaría la melena morena durante un tiempo, así como rizada, pero pronto comenzó a lucir la imagen a la que nos tiene acostumbrados, salvo a contados cambios realizados por exigencias del guión en sus trabajos cinematográficos.