Hay ocasiones en las que la vida te da sorpresas que ni siquiera podías imaginar pero, en el caso de Stephanie Jaeger, la cosa va un poco más allá. La mujer acudió a un hospital de Georgia (Estados Unidos) con un fuerte dolor en el riñón, por lo que pensó que podía tratarse de cálculos renales. Sin embargo, tal y como informa The Huffington Post, los médicos le dieron la feliz pero precipitada noticia de que estaba embarazada de ocho meses y que se había puesto de parto.
En tan solo media hora, Jaeger y su marido dieron la bienvenida a un precioso niño de algo más de tres kilos al que le han puesto el nombre de Shaun Jude Jaeger. La reacción de Michael Jaeger en Facebook no se hizo esperar y el asombrado padre colgó en esta red social distintas fotografías de su retoño junto a frases en las que mostraba su sorpresa y al mismo tiempo su irrefrenable alegría: "no existen palabras para describir todas las sensaciones de estar teniendo un bebé".
Michael Jaeger junto a su hijo recién nacidoStephanie y Michael Jaeger no habían tenido tiempo de preparar absolutamente nada y tuvieron que hacerse a la idea de que iban a ser padres en un tiempo récord. "Vamos a planear en dos días, lo que los otros hacen en nueve meses", escribió Michael Jaeger en su cuenta de Facebook. Además aseguró que la llegada de su pequeño no había sido algo fácil, principalmente por lo inesperado del alumbramiento, sin embargo tanto él como su mujer se sentían muy bendecidos.
Un embarazo inesperado
Las preguntas sobre cómo la mujer no pudo darse cuenta de que estaba embarazada no han dejado de aparecer. El recién estrenado padre intentó dar respuesta a todas ellas explicando que "Stephanie fue diagnosticada de pre-menopausia hace tiempo, algo que implica un desajuste hormonal similar al de un embarazo". A esto hay que añadirle que el bebé venía de nalgas, motivo por el que la criatura apenas se movía dentro de la barriga de su sorprendida madre. Por último, Stephanie Jaeger había sufrido una rotura de tobillo tan solo dos semanas antes del nacimiento, lo que la obligó a permanecer en la cama manteniendo reposo absoluto.
